ME SIENTO PERDIDO... – Dinero en Sandalias

Alguno de ustedes actualmente siente, o ha sentido alguna vez esa sensación de vacío? Se ha mirado al espejo, y dicho: «Me siento perdido»? Se que no es fácil llevar la vida cuando se esta alejado del propósito de ella, cuando se pierde la motivación…

Por ello les comparto este escrito que me dejo uno de ustedes, que me envió al correo sin yo antes pedírselo, y me parecieron bien bonitas, o mas bien, bien sinceras sus palabras. Y es que saben algo? Al igual que un alcohólico, o un drogadicto, el primer paso para tener un gran cambio en la vida es identificar el problema, y aceptarlo. Ya luego es que se empieza a crecer.

Gracias Jesús por la confianza, y acá va tu escrito mi parcero… 😉

«Escribo estos párrafos, con la certeza de que no soy escritor, pero con las ganas de expresar lo que esta inquietud ha causado en todo mi ser, en todos mis sentimientos, en todos mis pensamientos. Y es que quien no se siente cautivado…

¿Por saber que está siendo con su vida? ¿Y si lo que está haciendo es lo que realmente lo hace feliz?

Siento gran admiración, respeto y envidia, sobre todo envidia, de todas las personas que son apasionadas y felices por lo que hacen, ya que no todos contamos con la dicha de poder vivir de lo que nos gusta, de poder vivir la vida al máximo.

Tuve la fortuna de graduarme de una buena universidad de Bogotá, con apenas 23 años tenia un trabajo estable en el banco más grande de Colombia. Ver a mi familia orgullosa, poniéndome muchas veces de ejemplo ante los más pequeños, me llenaban los bolsillos de orgullo para nunca detenerme a pensar si era feliz.

Pero es ahora que hago una evaluación retrospectiva de mi vida que me doy cuenta de que la verdad, nunca lo fui.

Así siguieron trascurriendo los años, y cada vez que tenía el sentimiento de inconformismo la salvación era buscar trabajo en otra compañía, con la excusa de que la remuneración económica era mejor.

Estuve entonces deambulando por otro banco, por una productora de cerveza artesanal y por un prestigioso grupo empresarial donde actualmente me encuentro laborando.

Pero es apenas ahora que comprendo que los cambios no eran por las mejores condiciones económicas, sino porque nunca he sido feliz. Nos acostumbramos tanto a la cotidianidad, a los trancones, al cumplir un horario, a la rutina, que se nos va la vida sin tomarnos un segundo para evaluar si somos felices, si con lo que soñábamos de pequeños lo estamos cumpliendo.

Pero desde hace un par de días, la pregunta, esa de que si soy feliz, ha estado presente en todas las actividades que realizo. Y hoy con certeza digo NO, esta vida que llevo me sirve para tener ciertas comodidades, para tener algunos lujos, como poder tener una buena cena o poder viajar para olvidarme de mi propia vida. ¡Que ironía!

Pero esta sensación de que la vida se me va sin encontrar lo que realmente me hace feliz, me está revolviendo todas las entrañas, siento que no puedo más, que el peso de tener que aparentar ser feliz esta al tope, que la copa de vino no aguanta una sola gota de hipocresía más!

No puedo permitir que la oportunidad de vivir se vaya sin tripulantes.

Estoy seguro de que no quiero seguir viviendo como hasta ahora, pero ahora viene un gran desafío, encontrar lo que realmente me hace feliz. Siento que ya llevo algo de camino transcurrido, y es que no es fácil aceptar que queremos cambiar, y mucho menos sentarnos a pensar en nosotros mismos y nuestro futuro.

Pero es que estoy tan enfocado de que quiero encontrar mi verdadero destino, que estoy seguro, que sea lo que sea, no me va a interesar pero para nada lo que crean mis amigos, mi familia o la misma sociedad, por que como dice Daniel, la persona mas importante de mi vida soy yo!

Tengo la tarea de enfocarme en cada esquema, en cada persona, en cada artículo, que tengo que ir hasta el fondo de mis pensamientos, de mi ser y si es necesario de la ciudad, para encontrar mi verdadera vida. Y se que lo voy a lograr, que cada persona que tenga la decisión de lograrlo lo va hacer.

Estos párrafos son grito, una sacudida, una cachetada de la vida, y de esa pregunta. ¿Soy feliz?

Gracias Dany por el espacio,