VIAJAR PARA VIVIR Y VIVIR PARA VIAJAR

Suena extraño este titulo de «Viajar para vivir, y vivir para viajar», casi como a un trabalenguas, pero saben que? Asi es exacto como funciona la vida de un nómada digital, a quien le toca viajar para conseguir su sustento diario, pero quien a la par, vive por los viajes, es su pasión, su llamado, su propósito en la vida!

Y es que es bien claro que desde nuestro primer día de vida, incluso desde antes creería, cada uno ya viene con un propósito de vida muy claro, como decía Paulo Coehlo (wohoiii, por fin aprendí a escribir su apellido) en su libro «El Alquimista», su leyenda personal. Otra cosa es que nos desviemos de ese mapa que ya traíamos trazado al ir creciendo y llenándonos de lo que yo llamo, basura mental, que es esa información que nos implantan desde chicos o que vamos cogiendo del ambiente que nos rodea, pero que no necesariamente somos nosotros…

Algunos nacen para ser arquitectos, otros ingenieros y otros tantos divagan un poco hasta encontrar su pasión en la vida. Nada está mal, ninguna decisión es correcta o incorrecta, lo realmente importante es hacer lo que nos apasiona y hacerlo con amor.

Para todos esos que quieran empezar en este apasionante mundo de los nómadas digitales, les digo que viajar para nosotros es además de una profesión, un estilo de vida, una decisión que nos obliga a despertarnos día a día en un lugar diferente, con olores, sabores, culturas y personas dispuestas a enseñarnos y sacar lo mejor o peor de nosotros mismos.

Es ponernos a prueba, exigirnos y conocer a fondo nuestros defectos y cualidades… es retar a nuestros miedos y abrazar la soledad, suspirar con los paisajes y llorar con los recuerdos.

¿Que si se puede vivir de los viajes? O como dije, viajar para vivir…

Claro que se puede, pero como cualquier empresa, negocio o emprendimiento necesita dedicación, esfuerzo y constancia. Es diferente, emocionante, cautivante, decepcionante, a veces demasiado fácil y otras tantas, demasiado difícil, pero ¿qué no lo es?

Sin embargo, me atrevo a decir, que no existe trabajo más gratificante que poder conocer cada rincón del mundo y dejarse deslumbrar con cada maravilla que los ojos pueden ver, pues al final del día, vale más todo lo que conoces y vives que las horas que permaneces sentado frente a una pantalla de computador (sin desmeritar ningún trabajo o decisión de vida).

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Así que si el dilema está en dedicarse o no a vivir de los viajes o viajar para vivir, para los aspirantes a ser nómadas digitales. Y para el resto de personas, a encontrar su leyenda personal. Por que ojo, yo en este blog hablo de la mía, que son los viajes. Mas no es la única… Conozco a muchas personas que viven de ser poetas, otras de montar a caballo, incluso conozco a uno de mis amigos de la universidad (cuando curse mi primer y único semestre de ingeniería, antes de abandonar la universidad) quien ahora es astronauta!

Astronautaaa? Asi es señores, y con tremendo salariazo! Pero igual eso no es lo importante ahora, estamos hablando es de felicidad, y les digo, les aseguro, que será algo que solamente encontraran al reencontrarse con su propósito y mas nunca abandonarlo… Por que la vida es muy corta señores como para no hacer lo que nos apasiona, para limitarnos y dejarnos llevar por el miedo.

Tal vez a mi amigo astronauta nunca le dijeron que era imposible llegar a serlo. O quizás como en mi caso, si tuvo muchos roba sueños ahí encima diciéndole que dejara de soñar bobadas, que nunca podría llegar a ser un astronauta, y que eso era solamente para ciertos personajes de barbas blancas de la NASA… No importa que fue lo que le toco pasar a mi amigo, pero si se que no le fue facil, por que nunca lo es!

No es fácil, no es rápido, no es magia poder encontrar y luego vivir de eso que los apasiona… pero les digo algo, y desde mi ejemplo. Es gratificante trabajar con amor, con pasión, viviendo al 100% de eso que nos gusta y dejando nuestro granito de arena a esta humanidad.

Y ya nuevamente hablando de mi caso, explorando cada rincón de este increíble mundo en el que vinimos a aterrizar. Que al igual que mi amigo astronauta, desde que estaba chico era lo único que deseaba hacer cuando grande! 🙂