
Sabes algo, acepta que no le importas a nadie… 🙁
¿Te encuentras a menudo quejándote porque no tienes el trabajo que quisieras, o la pareja que quisieras, o la vida que quisieras? ¿Te parece que la vida es injusta contigo porque hay otros que han hecho menos que tú y están mucho mejor?
¿Piensas que eres una buena persona y por eso no entiendes por qué te pasa lo que te pasa? ¿Crees que eres un excelente empleado y que no valoran tu trabajo? ¿Siempre alguien más es culpable de tu situación? ¿Tal vez tus padres, tu pareja, tu jefe, el gobierno?
Aghh, pobrecito…
Ok, pues hoy te tengo una noticia que puede no ser muy agradable, pero es que la verdad ¡no le importas a nadie! Así es, ¡Nadie te debe nada y tú no le debes nada a nadie!
Acéptalo!
Uich… qué agresividad…
No me malinterpretes, seguramente hay mucha gente que te quiere, que te aprecia, que te estima, pero eso no cambia el hecho de que cada uno vela por sus intereses y sus necesidades, es nuestra naturaleza. Mientras tú te estás quejando por tus infortunios, tu jefe y tus padres y tu novia(o) están lidiando con sus propios asuntos, con sus propias preocupaciones, con sus propias quejas.
Es más, siendo sinceros, si miras los toros desde la barrera, es probable que te des cuenta de que tus quejas sólo son pataletas de niño chiquito, que tus problemas no son tan graves como parecen y que cuando ves la dura realidad de muchas personas en este mundo, tus preocupaciones son hasta chistosas.
Así que por favor, no te conviertas en la víctima de tu propia historia.
Todos vinimos a este mundo con un único súper poder, hacernos a nosotros mismos tal y como queramos. A nosotros mismos, a nadie más. Así que si hoy estás en un lugar de tu vida que no te gusta, créelo, consciente o inconscientemente tú hiciste lo necesario para llegar allí.
No hay nadie que pueda llevarte sin tu consentimiento, aunque eso quieras creer y prefieras culpar a alguien o algo más para evadir tu responsabilidad.
Y no hablo de culpa, la culpa es la emoción más inútil que hay sobre esta tierra.
Hablo es de responsabilidad. Cuando te culpas por algo estás llorando sobre la leche derramada, estás pensando en algo pasado que ya no puede ser cambiado, estás cargando una maleta llena de ladrillos mientras subes una montaña, es como una tortura que no cambia nada.
Pero cuando asumes la responsabilidad, entiendes que tienes el poder de elegir, y que llegado el momento podrás tomar decisiones diferentes, aunque tengas que asumir las consecuencias de lo que ya pasó.
Así que mi parcero, te invito a mirarte al espejo y aceptar que tú has sido el arquitecto de cada área de tu vida. Y si, tal vez ha sido una experiencia desafiante para ti, pero te garantizo que si a partir de hoy haces bien las cosas, y asumes esa responsabilidad, recobraras nuevamente ese poder personal que poco a poco fuiste perdiendo.
Les entregaste un poco a tus padres cuando dejaste que ellos decidieran por ti. Y a tus amigos cuando actuaste como alguien que no eras para ganar su aprobación. Y a tu pareja cuando renunciaste a tu libertad para ganar su amor. Y a tus hijos cuando les diste todo lo que querían para evitar un berrinche. Y a tu jefe cuando permitiste que dispusiera de tu tiempo libre y te sobrecargara con trabajo sin pagarte más.
En fin, tal vez llevas toda la vida haciéndolo, de hecho, todos lo hemos hecho, buscando que nos quieran, que nos valoren, que nos acepten, que nos aprueben.
Y ¿sabes que es lo irónico de todo esto?
Que el único amor, la única valoración, la única aceptación, la única aprobación que necesitamos, es la nuestra, y no la tenemos.
No quiero ser pesimista ni fatalista, no creo en eso para nada, pero sí creo en que ser muy honestos con nosotros mismos es totalmente necesario si quieres ser libre y feliz. Y a veces esa honestidad puede incomodar y doler, porque los resultados que tenemos en nuestra vida no son los que queremos, pero es lo que nos permite reaccionar y replantear nuestro camino.
Así que la invitación de hoy es: Deja de victimizarte, deja de quejarte, deja de buscar culpables y empodérate.
Después de aceptar que lo que has pensado, sentido, hecho y dicho, te ha traído hasta donde estás hoy, y que nada ni nadie pudo haberlo hecho por ti, recobrarás la capacidad de elegir y de ser tú mismo, recobrarás ese súper poder que te pertenece.
Recuerda, nadie lo va a hacer por ti, así como tú no lo puedes hacer por nadie más. Nadie te debe nada y tú no le debes nada a nadie. Es tu decisión y tu responsabilidad, y es tu mayor regalo también.
Un saludo parceros… ?
Daniel Tirado / #BeachMoney
Comunidad de nómadas digitales: Trading, Forex, Bitcoin, criptomonedas y todo lo que sean negocios en internet y emprendimiento online.
PD: Sígueme también en “mi canal de Youtube” donde explico todo con mas profundidad!