Saltar al contenido

¿COMO VIVIR TRANQUILO Y EN PAZ?

Me preguntaron en un evento ayer sobre como vivir tranquilo y en paz, y me dejo pensando en esta gran época de cambio en la que el couching, el desarrollo personal, la evolución espiritual y muchas corrientes más están tomando por fin buena fuerza.

¿Lo sienten?  Y cada vez mas esa energía de transformación va ganando momentum y va contagiando a más personas alrededor del mundo. Es mas, creo que a estas alturas tiene más reversa un avión que esta revolución planetaria, que ni los más escépticos pueden negar que muchas cosas están pasando! 🙂

Pero seguramente, en todo el bombardeo de información de transformación que nos está llegando de todas partes, escuchamos a menudo que tenemos el derecho y casi que el deber de ser libres y felices (saber como vivir tranquilo y en paz), pero es probable que a veces nos sintamos confundidos y no sepamos qué hacer para lograrlo.

Y por eso decidí hoy escribir sobre «como vivir tranquilo y en paz«, para ayudarlos a dar pasos en esa dirección. Es que son algunas leyes universales sencillas que nos aplican a todos, y si, tal vez sean conceptos que ya has escuchado varias veces, pero estoy seguro que si los revisas conscientemente y los integras a tu vida vas a ser más libre y más feliz.

Tú eres un individuo completo, único e irrepetible.

No naciste incompleto, no te hace falta nada, ni “debes” ser o hacer nada adicional para ser tú. Suena un poco obvio, pero lo olvidamos a menudo, y esto nos hace sentir que no somos lo suficiente.

No somos media naranja (que necesita su otra mitad para sentirse completa), no somos un producto hecho en línea, no somos nuestros resultados positivos, ni los negativos, no somos lo que alguien más cree que somos o quiere que seamos, tampoco somos lo que “deberíamos” ser, y te pongo un ejemplo: ¿Si tienes un éxito, eres una persona diferente a si tienes un fracaso? No. Eres la misma persona, lo que cambia es tu emoción, y obviamente la frecuencia en la que vibras.

No hay nadie como tú (lo siento si les suena a canción de despecho), y ese es un valioso tesoro que tienes, así que la próxima vez que te encuentres diciéndote que “no soy capaz” o tratando de demostrar algo que no eres para ser amado, aceptado o valorado (por los demás o por ti), por favor para un momento y date cuenta que el único obstáculo entre tu miedo y tu libertad y felicidad eres tú mismo.

La soledad es buena o mala

Cada quien es un individuo único y ve la vida con sus propios ojos.

Cada persona a tu alrededor está completa y es única e irrepetible, y siente miedo e inseguridad, así como amor y felicidad, igual que tú.

Todos estamos en la constante búsqueda de la felicidad y queremos alejarnos lo más posible del dolor y el sufrimiento, aunque a veces tomemos decisiones equivocadas. Detrás de cada cosa que hacemos, así afecte positiva o negativamente a alguien más, sólo está nuestra necesidad de ser felices o de sentirnos bien. Difícilmente hay absoluta maldad o absoluta bondad detrás de un acto, nadie es totalmente “bueno” ni absolutamente “malo”.

En el fondo, todos nos movemos por las mismas emociones, pero en cada uno se despiertan por diferentes razones. Todos sentimos miedo, pero no por las mismas cosas, y no reaccionamos de la misma manera ante él, porque a pesar de que estamos hechos de la misma sustancia, cada uno somos una mezcla única de genética, experiencias, creencias, valores, conocimientos, en fin…

Es como si cada uno tuviera sus propias gafas y a través de ellas viera la vida, así que cuando te sientas tentado a criticar o juzgar a alguien por su forma de ver o vivir su vida, piensa que esa persona, igual que tú, está haciendo lo que puede con lo que sabe y tiene. Hace lo que cree que es correcto o lo que cree que va a ser mejor para sí mismo.

Tú no puedes saber lo que alguien quiere o necesita y nadie puede saber lo que tú quieres o necesitas.

Puede pasar que creamos que lo que a nosotros nos ha funcionado o lo que a nosotros nos parece es la verdad, y que tiene que funcionarle y parecerle a los demás, y resulta que no es así. O también podemos creer que lo que a otros les parece o les ha funcionado nos va a funcionar a nosotros, y no necesariamente.

Es que como cada uno de nosotros es único, y vemos las cosas de diferente manera, pues no tiene sentido que hayan “verdades” o “soluciones” que nos apliquen a todos.

Te recomiendo: Hijos emprendedores y ¿Como pasar del pensamiento a la acción?

Pero sólo tú sabes cómo te sientes frente a cierta circunstancia, por eso sólo tú puedes saber qué quieres o qué necesitas. Entonces, si ves que estás diciéndole a alguien lo que debe hacer o tú estás decidiendo qué hacer por lo que alguien más te dijo, por favor no lo hagas más. Vive y deja vivir.

Y no te cambies por alguien más ni quieras que alguien cambie por ti.

Cada vez que intentamos ser alguien más pasan dos cosas. La primera es que nos sentimos mal con nosotros mismos, porque es como si fueras un pájaro intentando nadar. Puede que los demás no se den cuenta que estás fingiendo, pero tú sí que lo sabes.

La segunda es que vas a culpar a la persona por la que estás actuando así, eventualmente le vas a echar en cara tus acciones, le vas a decir “lo hice por ti”. Probablemente, si alguien “cambia” por ti, pasaría lo mismo (lee también el poder del ahora).

Así que no esperes a que el otro sea lo que tú esperas que sea, ni seas tú lo que alguien más espera de ti. Cuando tu bienestar depende de alguien o algo externo, te sentirás insegur@ e inestable constantemente y eso no es vida.

Estoy seguro que si aceptas y aplicas esto que acabo de compartirte, podrás vivir tranquilo y en paz, alcanzar esa estabilidad emocional que tantos buscan a diario, pero que no siempre encuentran. Practícalo día a día y verás cómo se convierte en un hábito para ti.

Y, ¿Sabes algo? Te lo mereces! 😉

Daniel Tirado / #BeachMoney

Comunidad de nómadas digitales: Trading, Forex, Bitcoin, criptomonedas y todo lo que sean negocios en internet y emprendimiento online.

PD: Sígueme también en “mi canal de Youtube” donde explico todo con mas profundidad!

Comparte y ayuda a otros: